ARTE Y OTRAS COSAS: COMPOSICIÓN EN ROJO, AMARILLO, AZUL, BLANCO Y NEGRO Y OTROS AUTORES DEL NEOPLASTICISMO

A la izquierda puedes ver "Composición en rojo, amarillo, azul, blanco y negro" una obra pictórica sobre lienzo realizada por Piet Mondrian en el año 1921.

Se trata de un cuadro pintado al comienzo de la década de los veinte, los llamados "Felices veinte" cuando la comunidad internacional comienza a vivir un desenfreno sin límites en medio de una aparente prosperidad económica que terminaría de manera abrupta al final de la década con el Crack de la bolsa de Nueva York y la consecuente crisis económica.

Pero el final de la Gran Guerra no trae consigo únicamente una burbuja económica, también una aparente calma política que, lejos de traer prosperidad va a permitir el asentamiento lento y progresivo de regímenes totalitarios en Italia, Alemania y la Unión Soviética quienes lograrán cristalizar sus aspiraciones a finales de la década de los 30 con el advenimiento de la Segunda Guerra Mundial.

En el plano artístico y cultural, el periodo de entreguerras se caracteriza por la puesta en marcha de nuevas vanguardias artísticas. Si antes de la Gran Guerra movimientos como el Fauvismo, Cubismo, Expresionismo y Futurismo habían jugado a dos bandas, es decir, se centraban en obras pictóricas y escultóricas a medio camino entre la figuración y la abstracción; los movimientos artísticos surgidos tras el paréntesis bélico se caracterizan por una mayor atracción hacia la abstracción. Buena prueba de ello lo encontramos en la Bauhaus surgida en Alemania en 1918 y también en Holanda donde aparece el movimiento Neoplasticista.

Composición en rojo, amarillo, azul, blanco y negro fue realizada por el pintor holandés Piet Mondrian quien había formado parte del movimiento Neoplasticista quien a su vez conecta con la publicación De Stijl también holandesa y que es utilizado como vehículo para recoger sus ideas. Mondrian como muchos otros autores anteriores que él, también había pasado por un proceso evolutivo donde la naturaleza había sido la protagonista de sus cuadros como se observa en Manzano en flor o los bodegones como Bodegón con jarra de jenjibre I; si bien en la obra que nos ocupa forma parte del proceso evolutivo en el que Mondrian se aleja de toda conexión con la figuración para centrarse en lo verdaderamente importante, es decir, la plástica del cuadro y lo que pueda transmitir la combinación de líneas rectas y colores primarios.

El cuadro que puedes ver a la derecha, busca la renovación estética y la configuración de un nuevo orden armónico de valor universal que, en este caso, se encuentra reflejado en la perfecta combinación de líneas negras que conforman formas cuadrangulares o rectangulares llenando toda la superficie del lienzo.

Esto nos lleva al segundo elemento que defienden los neoplasticistas, depurar las formas con el empleo de líneas, planos y cubos como elementos compositivos básicos. Hablamos por tanto de un planteamiento racional, es como una depuración de otras vanguardias anteriores como el Cubismo que se basaba en el empleo de la geometría; al tiempo que conecta con otros movimientos que surgen tras la Gran Guerra y que también se decantan por la abstracción geométrica como el Suprematismo ruso, conecta con Kandisnky y con las aportaciones realizadas por la Escuela de la Bauhaus.

La combinación de líneas rectas y estructura de cuadrícula otorgan cierto orden y armonía compositiva al cuadro con un ritmo asimétrico pero gran sentido del equilibrio. La asimetría se observa en la variedad de tamaños de los rectángulos que impiden que las líneas sean simétricas pero con un resultado final perfectamente equilibrado.

Por último la presencia de fondos claros, en este caso blanco, que se combina con el negro y la presencia de colores planos saturados con especial predilección por el amarillo, azul y rojo que se convertirán en una constante en la obra de este autor.

Las claves del estilo de Piet Mondrian observadas en el anterior cuadro se ponen de manifiesto en la imagen que puedes ver a tu izquierda. Se trata de "Broadway Booguie-Wooguie" que coincide con la estancia del pintor holandés en Estados Unidos y donde intenta reproducir el dinamismo y frenesí de las ciudades americanas, en especial, Nueva York.

A esta serie pertenece también la obra Victoriy Booguie-Wooguie, donde juega incluso con el formato del cuadro.

Al margen de Piet Mondrian, vinculado al movimiento Neoplasticista se encuentran otros nombres como Theo Van Doesburg, arquitecto y diseñador, a quien se debe la decoración del Café Aubette cuya imagen puedes ver bajo estas líneas.

El edificio fue diseñado entre 1926 y 1928. La imagen que ves corresponde a una reconstrucción del café que se basa en el diseño original.

Se trata de un interior en el que tanto la configuración del espacio como el diseño del mobiliario se caracteriza por el empleo de motivos geométricos. Sin olvidar la máxima de combinar el diseño con la funcionalidad.

A la derecha puedes ver la "Silla roja y azul" diseñada por Rietveld otro integrante del movimiento neoplasticista.

Se trata de un diseño minimalista, en cuanto a pureza de líneas se refiere y ausencia de elementos ornamentales, realizado en 1917, donde combina las líneas geométricas con el empleo de los colores primarios en este caso rojo, amarillo y azul. La obra supone una representación en tres dimensiones de los cuadros realizados por Mondrian.

Al mismo autor corresponde Silla zig zag donde prescinde del color para jugar solo con la forma. Y la construcción de la Casa Schröeder, que puedes ver bajo estas líneas, y donde se pone de manifiesto la pureza de líneas en cuanto a estructura y ornamentación se refiere.