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jueves, 26 de marzo de 2020

MIGUEL ÁNGEL ESCULTURA I


En esta entrada vamos a centrarnos en la faceta como escultor de Miguel Ángel Buonarroti. En la imagen de la derecha puedes ver la "Madonna de la escalera" en la que Buonarotti está trabajando en 1491.

Se trata de una obra de juventud pero observa una serie de claves importantes:

-Nos encontramos ante un relieve donde la referencia espacial aparece conseguida con el schiacciato, es decir, el modelado que puedes apreciar en la figura de la Virgen.

-También la referencia espacial se marca con la posición del niño en completo escorzo. Y la profunda diagonal que viene marcada por la barandilla de la escalera en cuya zona superior podemos encontrarnos unos niños jugando.

-Fíjate en el tratamiento de los pliegues que conforman la indumentaria de la Virgen otorgando de cierto ritmo a la composición.

-Se observa una influencia de la antigüedad clásica recordando, en cierto modo, a los relieves que podemos ver en el Ara Pacis de Augusto.

-En cuanto al tema, es de carácter religioso. La Virgen está sentada con el niño en su regazo. Fíjate en el lenguaje corporal de María pues parece que está abriéndose la túnica para alimentar a su hijo.

A la izquierda puedes ver "Baco con un sátiro" realizada entre los años 1495-1496 y que corresponde a su primera estancia en Roma.

Si te fijas te darás cuenta que el conjunto escultórico esconde importantes conexiones con la escultura griega:

-La figura de Baco aparece de pie, date cuenta que el peso del cuerpo recae sobre la pierna izquierda que aparece completamente extendida, mientras que la pierna derecha aparece flexionada y ligeramente desplazada hacia atrás. Estamos, por tanto, ante el empleo del contraposto.

-El torso de Baco se encuentra recorrido por una curva que recuerda a la curva Praxiteliana.

-Si te colocas frente a la imagen observarás que se rompe la frontalidad pues la cabeza aparece ligeramente ladeada.

-Tras el Baco, aparece visible el Sátiro mordisqueando un racimo de uvas; llama la atención la expresión pícara del personaje. Ambos personajes, Baco y Sátiro aparecen representados completamente desnudos como sucede con las esculturas del periodo griego, resaltando la importancia del cuerpo humano.


Sobre estas líneas puedes ver la "Pietá" realizada entre 1499-1500 que actualmente se conserva en la Basílica de San Pedro del Vaticano. En este caso Miguel Ángel recupera un tema que ya había aparecido en la escultura del Gótico, si bien, en este caso el autor italiano la cubre con el manto del Humanismo. Buonarroti respeta la representación tradicional de este tema: la Virgen se encuentra sentada sosteniendo en su regazo el cuerpo sin vida de su hijo que acaba de ser bajado de la cruz. No obstante, la huella humanista se aprecia en el minucioso estudio anatómico que Miguel Ángel realiza del cuerpo de Jesús; así como en el rostro de la Virgen, más joven que su hijo, rasgo éste que causa cierta controversia en su momento. Además, esta pieza está firmada por el propio autor. El pecho de la Virgen está cruzado por una cinta donde se puede leer "Michaelangelo me fecit" lo que supone toda una declaración de intenciones por parte del autor.

Desde el punto de vista compositivo, la "Pietá" del Vaticano aparece organizada con el empleo de una figura piramidal que permite inscribir al conjunto. La cabeza de María es el vértice del triángulo, mientras que la base está organizada por la propia base en la que se asienta el conjunto.

Fíjate además en las líneas compositivas. A destacar la verticalidad de María que se cruza con la horizontal del cuerpo de Cristo que, a su vez, aparece recorrido por una curva. Esta curva, junto con el juego observado en los pliegues nos permite hablar de ritmo compositivo. Además, el torso de la Virgen no aparece completamente recto, sino que es posible observar también la presencia de una ligera curva.


En este detalle puedes apreciar el dominio de Miguel Ángel para trabajar el mármol de Carrara material con el que está realizado el conjunto. Fíjate en la rugosidad de la tela con que viste a María; en los pliegues del velo con que cubre su cabeza; en las calidades del cuerpo de Cristo; y en la belleza del rostro de la Virgen que aparece con la mirada baja. Si bien la dulzura de su rostro no refleja ningún atisbo de dramatismo como, sin embargo, puede apreciarse en las representaciones que sobre el mismo tema se realizaron durante el Gótico.

Por último, es importante que te fijes en el lenguaje corporal del cuerpo de Cristo cuyo brazo derecho cae inerte y su cabeza aparece colocada hacia atrás, signos evidentes de la falta de vida en dicho cuerpo.

Por su parte, su madre coloca la mano izquierda con la palma hacia arriba reforzando así la expresión del rostro. Mientras con la mano derecha sostiene el cuerpo sin vida de su hijo.

En la imagen puedes ver el "David" apodado el gigante, fue realizado en mármol de Carrara por Buonarroti entre los años 1501-1502. Esta obra supone su vuelta a Florencia y con ella se termina la etapa de juventud.

Nuevamente se toma como referencia el mito de la Biblia, pero en este caso el autor prefiere representar al joven héroe en el momento anterior a enfrentarse a su adversario. Al contrario que las versiones que sobre el mismo tema son realizadas por Donatello y Verrochio en el Cuattrocento, aquí nos encontramos ante un hombre adulto como se pone de relieve en el minucioso estudio de la anatomía.

Fíjate que la figura aparece de pie y es posible observa el contraposto característico de la estatuaria clásica. Además el torso aparece recorrido por una suave curva y se rompe la frontalidad pues la figura no mira de frente sino que gira la cabeza obligando al espectador a moverse.

En este detalle puedes fijarte en la técnica del trépano que el autor utiliza para trabajar la cabellera rizada. También es importante que observes el rostro del personaje, la mirada aparece fija en el enemigo pero al mismo tiempo esconde un profundo estudio psicológico. El autor quiere transmitir al espectador la tensión que el héroe está viviendo los momentos anteriores a entrar en acción. Esto se observa en los ojos, en el ceño fruncido y también en las manos. La mano izquierda la levanta hacia el hombro donde descansa la honda, mientras que la mano derecha aparece extendida sopesando los proyectiles que necesita arrojar con la honda.


La tensión de la que se ha hecho referencia con anterioridad, puedes verla en el detalle que aparece en la imagen de la derecha. Observa cómo aparecen trabajados las falanges de la mano derecha, así como la representación de los tendones y venas. Todo ello unido al minucioso estudio anatómico que puede verse en la escultura pone de manifiesto la importancia del hombre conectando con la corriente humanista.

Ten en cuenta que Miguel Ángel, igual que Leonardo, realiza visitas clandestinas a los depósitos de cadáveres para estudiar la anatomía humana. Solo así se observa tal grado de verismo en las obras de este autor.


Por último, indicar que la igual que otras interpretaciones del mismo tema realizadas en el siglo XV, también la versión de Miguel Ángel es un símbolo de la ciudad de Florencia. No obstante, cuando Buonarroti está trabajando en su versión del David, ya no se trata de una Florencia próspera, sino que está atravesando importantes dificultades políticas, económicas y sociales. Si bien vuelve a erigirse para intentar superar todo tipo de obstáculos.

A continuación os dejo un breve vídeo sobre Miguel Ángel



Bibliografía.

V. V. A. A. (1994) Historia universal del arte. Renacimiento I. Planeta.
V. V. A. A. (1994) Historia universal del arte. Renacimiento II /Manierismo.  Planeta.
V. V. A. A. (2000) Miguel Ángel. El desafío del hombre a la materia. Electa.
COPPLESTONE, T. (2007) Miguel Ángel. Lesma ediciones.
GARCÍA PONCE DE LEÓN, P. (2006) Miguel Ángel. Pintor, arquitecto y escultor universal. Libsa.

Referencia de las imágenes utilizadas en esta entrada:


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